martes, 12 de mayo de 2009

A Barty


Cuando llegaste no supe cómo sería tenerte, no fue fácil, fueron muchas noches de rezos y lágrimas esperando tu mejora.
Gracias a Dios hoy sigues aquí y cada día mejor!

Eres tan dulce, tan tierno, tan inocente...
eres mi Súper Bartolomeo.

Fuerza bebé, cada nuevo día es un nuevo comienzo, solo te pido por favor… ya no muerdas mis zapatos…

No hay comentarios:

Publicar un comentario